El madrileño Eduardo Vegas, un joven afectado por un Trastorno del Espectro del Autismo, se muestra orgulloso de la medalla de bronce ganada en golf en los recientes Juegos Olímpicos Especiales de Abu Dhabi.
“Había mucho viento y mucho calor, había que jugar la bola por la izquierda y cuando llegaba a la calle no paraba de rodar porque no había casi hierba”, señala Eduardo Vegas.
“Como me dedico a entrenar, pues eso, que los arraso”
Eduardo tiene 40 años y ya ha sido diez veces campeón de España de golf adaptado. “Como me dedico a entrenar, pues eso, que los arraso”, confiesa.
En el green es casi infalible, aunque él disfruta desde el tee de salida. “A mí me gusta el driver, el golpe largo”, concluye el golfista madrileño.
Con 29 años sorprendió a sus padres cuando les pidió practicar el golf y pese a que sufre trastorno autista, demuestra cada día que nunca hay que rendirse.