Christian Hernández es un exfutbolista de Pumas que quedó paralítico tras sufrir un asalto en 2014, ha realizado una reconstrucción de su vida en la que ha puesto una meta muy clara: competir en los Juegos Paralímpicos.
Tras sufrir la rotura de tres vértebras en el mencionado asalto, cuando jugaba para el Atlético Coatzacoalcos, su carrera en el fútbol termino, aunque encontró una nueva puerta en su vida:
«Mi vida cambió en todo, pero siempre se puede hacer lo que uno quiere. Los diagnósticos de los doctores no eran alentadores, pues me dijeron que quedaría en estado vegetativo, que no me valdría por mí mismo y no fue así», le contó al Diario RÉCORD en una entrevista. 
Su buena recuperación no se podría entender sin el apoyo de su familia, pese a que el pensó en tirar la toalla:
«Hoy hasta ellos están sorprendidos de mi recuperación y ahora que voy tan bien no me voy a detener por nada. En su momento, sí me quise rendir, pero mi familia estuvo conmigo», dijo al mismo diario.
Por supuesto, aunque ya no lo práctica más, el fútbol y su afición a los felinos fueron un motor importante para no decaer:
Una vez recuperado, empezó a buscar un hogar en el remo. Y así, surgió el sueño de competir en los Paralímpicos, además del ambicioso deseo de practicar handcycling:
«Empecé a buscar alternativas para seguir haciendo deporte porque quiero competir. Mi meta es llegar a unos Juegos Paralímpicos. La primera disciplina que hice fue remo y me gustaría hacer handcycling, pero es muy caro, pero sé que puedo lograrlo y salir adelante de todo lo que se me presente», declaró.
Tras el incidente que le cambió la vida en 2014, Pumas organizó una subasta para recaudar fondos en busca de su recuperación. Y aunque nunca logró debutar en primera división con el club, se mantuvo del Clausura 2011 al 2013 en Pumas Morelos.
