El cerrador de los Dodgers de Los Angeles. Kenley Jansen se someterá a cirugía del corazón el próximo 26 de noviembre y espera estar listo para el arranque de los entrenamientos de primavera.
El estelar relevista ha sufrido dos veces incidentes de arritmia cardiaca estando con los Dodgers en la altitud de Colorado. El más reciente ocurrió en agosto, cuando tuvo que someterse a shocks eléctricos para ajustar su ritmo cardiaco.
Jansen fue operado del corazón en el 2012 por el mismo problema.
El derecho mencionó que, si todo sale bien, podría reanudar las actividades físicas en dos semanas. Pero que si los doctores encuentran algo anormal, Jansen indicó que podría estar inactivo durante ocho semanas, aunque podría seguir hacer su rutina de acondicionamiento físico y así poder estar listo para el día inaugural de la próxima temporada.
Parte de los problemas de Jansen durante el 2018 fueron la reaparición de una arritmia que ha afectado al curazoleño en más de una ocasión. A su regreso tras una ausencia del 10 al 20 de agosto, el medicamento que tomaba el taponero limitó su nivel de energía y lo dejó en un estado de letargo que impactó su habilidad de sacar los outs.
Desde entonces, Jansen le ha hecho asustes a la dosis de dicha medicina para mitigar sus efectos secundarios y, al mismo tiempo, asegurar su salud cardíaca en sentido general. A la vez que trata de ayudar a los Dodgers a ganar un campeonato, el derecho piensa en una cirugía que se le practicará después de esta temporada para corregir el problema de corazón de una vez por todas.
«Ha sido algo difícil este año, sobre todo cuando volví», dijo Jansen durante la Serie de Campeonato de la Liga Nacional entre los Dodgers y los Cerveceros. «Siento que tengo dos personalidades diferentes ahora mismo: Una que quiere someterse ya a la cirugía y otra que quiere salir a competir y ayudar a mi equipo a ganar».
Eso mismo ha hecho Jansen. El diestro llegó al viernes sin permitir carreras limpias en 5.1 entradas de esta postemporada, con tres juegos salvados. Afirma el veterano de 31 años recién cumplidas que la intensidad de los playoffs lo ha ayudado a lidiar con el letargo que en ocasiones le sigue causando su medicamento para la arritmia.
«Definitivamente, no es fácil, porque cuando lo tomas te sientes con sueño a veces», expresó. «Pero tienes que luchar con eso. La adrenalina de los playoffs me ayudó a enderezarme. Trato de no pensar mucho en eso. Sigo diciéndome que estamos aquí, donde hemos hablado de estar todo el año, para tratar de ganar un campeonato».
