El 2018 será el útimo año de vida de Marieke Vervoort. La campeona paralímpica en Londres 2012, y ganadora también de una medalla de plata en Río 2016, ha pedido la eutanasia ante unos dolores que hacen que cada día se deprima «más y más». «No soporto tanto dolor, ya no quiero sufrir más», ha asegurado la belga, que sufre una tetraplejia progresiva incurable desde los 14 años.
«Nunca tuve esos sentimientos, pero no puedo más. Es muy difícil para mí, cada día me deprimo más y más». A sus 38 años, la exatleta belga ha confirmado en una entrevista en ‘The Telegraph’ que está lista para someterse a la eutanasia.
Paralizada hasta el pecho
Vervoot tiene el cuerpo paralizado hasta el pecho. En estos últimos meses, además, sufre bastantes espasmos, síntoma de que, según su neurólogo, «su cuerpo grita que ya no puede más».
Hace siete años habló por primera vez de la eutanasia, pero siguió adelante y compitió hasta conseguir dos medallas (oro y plata) en Londres 2012. En Río de Janeiro, se colgó la presea de plata en 400 metros en silla de ruedas.
Legal desde el 2012
Ahora, Marieke Vervoort ha decidido decir basta a su sufrimiento. Bélgica legisló la eutanasia en el año 2012, y dado que la atleta ha cumplido con todos los requerimientos legales, dos médicos ya han firmado los documentos que avalan su petición.
El doctor Wim Distelmans, que le ha salvado la vida en varias ocasiones, será el encargado de realizar el proceso de muerte asistida a la belga en una fecha por determinar del 2018.