Tiger Woods ha reconocido públicamente este miércoles lo que ha sido obvio durante algún tiempo, que podría no volver al golf competitivo. El ex número uno del mundo ganó el último de sus 14 ‘majors’ en 2008 y ha jugado seis torneos en los últimos dos años mientras trataba de recuperarse de varias cirugías en la espalda.
“Sí, sin duda, no sé lo que me deparará el futuro”, ha dicho en la víspera de la Presidents Cup cuando se le preguntó si había la posibilidad de que no volviera a competir de nuevo a sus 41 años.
“Cada cosa a su tiempo. Primero me preocuparé por mi salud para estar seguro de que ya no tengo dolor, y luego esperaré a lo que le diga mi cirujano. Estoy entrenando, estoy cada vez más fuerte, pero todavía no he trabajado los músculos que se utilizan para el golf”, ha dicho Woods.
La última operación de Woods en la espalda fue el pasado abril. “No sé lo qué significa estar 100% saludable después de ocho cirugías, pero intentaré acercarme lo más posible a ese número”, añadió Woods.
“Hay alguien aquí que tenga 40 años y se sienta como si estuviera 20 años?. Eh?, En serio?, Exactamente como os he dicho chicos, estoy golpeando tiros de 60 yardas”.
“El dolor ha desaparecido, pero no sé cómo mi cuerpo va a reaccionar porque todavía no he estado en un campo de golf, por lo que tomará tiempo y hay que ser paciente”, ha concluido Woods, asistente del capitán Steve Stricker, junto con otros tres asistentes, Fred Couples, Davis Love y Jim Furyk en la Presidents Cup.
Tiger Woods no descarta retiro si la salud no mejora
