Caracas. Yescarly Medina nació con la condición de Parálisis Cerebral Infantil, la cual compromete las funciones de su cerebro y de su sistema nervioso como el movimiento, el aprendizaje, la audición, la visión y el pensamiento.
La madre de la pequeña se sintió muy nerviosa al escuchar el diagnóstico de los médicos, no solo por lo que implica la afectación, sino porque era muy joven en ese momento. «Aunque mi mamá era inexperta por la edad que tenía cuando yo nací, siempre conté con su apoyo y con el de mi abuela», dijo la muchacha.
A medida que Medina crecía era más difícil su día a día porque las burlas y el rechazo social siempre estaban presentes. «Me sentía muy mal porque me decían loca e ignorante. Me tenía que esconder para llorar y que no se siguieran burlando de mí», recordó.
Por ello, sus familiares cambiaron a Yescarly para una institución especial en donde pudo desenvolverse con mayor facilidad y comprensión. Allí, la joven descubrió sus talentos y se propuso seguir adelante aceptando su condición y trabajando en mejorar su calidad de vida.
Más tarde, al salir de la entidad educativa para niños con condiciones especiales, su profesor de educación física la remitió a un entrenador de personas con discapacidad y fue cuando Yescarly incursionó en la práctica deportiva en la disciplina de atletismo.
Como corredora paralímpica ha participado en campeonatos nacionales e internacionales que le han otorgado más de 22 medallas y ocho reconocimientos que la posicionan como una de las mejores deportistas en la modalidad.
«El deporte es todo para mi porque me ha hecho sentir aceptada e útil. Gracias a él he conocido otros países y ciudades como Chile, Ecuador y Toronto. La discapacidad te enseña a vivir y aceptarte tal y como eres, además te convierte en un ejemplo a seguir», expresó.
«El deporte me ha hecho sentir aceptada e útil»
