Le Mans, Francia. Frederic Sausset emocionó a todos cuando cruzó la meta de Le Mans hace un año en su LMP2 adaptado. Ahora, junto a Billy Monger, quiere crear una academia para piloto con discapacidades con el objetivo de que el inglés y otros dos pilotos más corran las 24 horas de Le Mans 2020.
Una bacteria estando de vacaciones en 2012 se le extendió por el cuerpo y los médicos tuvieron que amputarle las cuatro extremidades para salvarle la vida. El francés se propuso correr en Le Mans, donde de niño veía a héroes al volante, y lo logró el 19 de junio de 2016 con un LMP2 adaptado compartido con Jean-Bernard Bouvet y Christophe Tinseau.
Ahora quiere ir más allá: tener su propio equipo de carreras y dirigirlo tras la inigualable experiencia de hace un año. Para ello, ya ha cerrado el acuerdo con Billy Monger, el joven piloto de F4 británica que conmocionó al mundo el pasado abril tras perder las dos piernas en un terrible accidente en Donington Park.
El objetivo es crear una academia de conducción para personas con discapacidad y llevar a algunos al máximo nivel de competición. Para ello organizará en noviembre de 2017 dos sesiones de selección en el circuito Bugatti de Le Mans, donde 15 candidatos serán seleccionados para un programa de tres años. 
“La idea de comenzar con esta academia fue utilizar mi credibilidad tras 2016 para algo al máximo nivel. Está apoyada por la FIA y la ACO. Cristophe [Tisneau] estará con nosotros en la preparación para Le Mans 2016”, aseguró Sausset este sábado en Le Mans. “El programa ya ha recibido el apoyo de varios sponsors y algunos son del proyecto de 2016. Estamos en contacto con dos constructores sobre los que decidiremos lo antes posible”.
El programa tendrá como objetivo el primer año competir en el VdeV francés (6 carreras de 4 horas) con un GT3. En 2019 se dará el paso a un LGMTE para competir en las European Le Mans Series y no se descarta la posibilidad de entrar en prototipos (LMP2 o LMP3).
Y para 2020 el deseo es estar de vuelta en las 24 horas de Le Mans además de completar las ELMS. Sausset aún no descarta utilizar un LMP2 o incluso un LMP1 para entonces, pero dependerá del nivel de patrocinios que consiga y de la valoración que haga la ACO.
“La academia será global. Billy Monger es una inspiración para todos por lo que ha pasado y por la actitud que ha demostrado. Estoy súper orgulloso de estar a su lado y de considerarle como un hermano. Por supuesto que Billy ya tiene un asiento y estoy encantado de tenerlo a bordo. Cristophe y yo estaremos en el VdeV con él en noviembre”, apuntó Sausset.
“Fue increíble cuando Frederic me habló sobre el proyecto. Es algo impresionante estar con gente que ha luchado tanto por estar en este deporte. Estoy emocionado por ver hasta dónde llegamos con este proyecto. Aun me queda para poder volver a competir, pero estoy trabajando al 100% para ello”, añadió por su parte, el joven piloto inglés de 17 años.
“No sé cuando estaré en el coche por primera vez. El proyecto ahora es pasar el máximo de horas en el simulador, seguir un programa de entrenamiento físico para volver a estar en forma. Tendremos que adaptar los sistemas del coche para que pueda pilotarlo y me acostumbre a usarlos”.
Sobre los sistemas que utilizarán en noviembre en el VdeV en Estoril con el Ligier-Honda JS53 Evo 2 con el que el piloto francés comenzó a prepararse en 2015, Sausset dejó claro que los combinarán, dado que Monger puede pilotar con un volante normal, pero a priori utilizará el sistema de aceleración y frenado con las piernas que el francés empleó en Le Mans 2016.
Sausset, que cuenta con el apoyo de la FIA y el ACO, deja claro que él no correrá en principio en Le Mans 2020 y hará las veces de jefe de equipo. Pero descarta inscribirse como Garaje 56, el proyecto especial que ACO se reserva cada año y que del que el francés participó en 2016.
“Queremos competir contra los demás pilotos en las mismas condiciones y en la misma categoría”.
Frederic Sausset, el primer cuadramputado en terminar Le Mans
