SANTO DOMINGO. La Fiscalía del Distrito Nacional solicitó prisión preventiva contra el instructor Santiago Geovanny Castro por intento de homicidio al presidente de la Federación Dominicana de Karate, José Luis Ramírez, así como otros dos miembros de la organización. En tanto, la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional conocerá hoy la solicitud.
Castro es acusado además de porte ilegal de armas de fuego por lo que la Fiscalía del Distrito solicita al tribunal que le imponga prisión preventiva como medida cautelar.
A Castro le exigieron disciplina en la mañana del pasado sábado en el pabellón de combate de Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, con el ingrediente de que sería su última oportunidad.
En respuesta, según expresa el entrenador de la selección nacional de karate y presidente de la Asociación de Karate del D.N., Antonio Vólquez, llegó en horas de la tarde, alegando que sólo tiraría fotos, y disparó al presidente de la Federación Dominicana de ese deporte, José Luis Ramírez, a quien impactó dos veces. Luego hizo lo mismo contra Vólquez, quien afortunadamente resultó ileso, después de tres disparos.
“Normas que le llamaron a cumplir y que no quiso obedecer”, dijo Vólquez. “No es más de ahí”. Desde el año pasado, explicó Vólquez a DL, se le había sugerido a Castro que era inadecuado dar clases vestido de civil. Debe de ser en traje de karate, blanco “impecable”, explicaron ayer en rueda de prensa directivos de la Fedokarate y de la Asociación del Distrito Nacional. “No vamos a permitir que esto se quede impune”, dijo el presidente advitam, de Fedokarate, Antonio Acosta.
El hecho, ocurrido el sábado alrededor de las 4:00 p.m. y se produjo en medio de un seminario internacional de la Confederación Caribeña de Karate, la que también preside Ramírez, quien a su vez se recupera satisfactoriamente.
Vólquez dijo que Castro también apuntó a los directivos internacionales, pero la pistola estaba encasquillada. Vólquez pidió disculpas a los visitantes. Un total de 26 “representantes” de nueve países, incluido RD, participan en el seminario.
Durante la mañana de ayer se querellaron tanto Ramírez, representado por una hija, como Vólquez en la fiscalía del Distrito Nacional. Según los directivos, Castro nunca dio señas de ser agresivo. Vólquez rechazó la existencia de una situación personal, ya que un hijo suyo tomaba clases con Castro, quien permanece detenido en el Palacio del Justicia del Distrito Nacional.