El exciclista español Iván Gutiérrez ha confesado en el programa ‘El Partidazo’ de la Cope los graves problemas que ha sufrido desde que abandonó el ciclismo profesional, tras caer en una profunda depresión que le ha llevado a tener hasta once ingresos por intentos de suicidio: “Hay días buenos, otros son normales y muchos días son oscuros. Hace mucho tiempo que no tengo un día completo de bienestar”, ha explicado.
“He tenido once ingresos por intentos de suicidio. Me tomaba todas las pastillas que tenía en casa. No podían dejarme solo por riesgo a que me hiciera daño”, ha destacado el excorredor. “Cuando dejé la bici fui a peor. Pasé semanas sin salir de la cama y no me dejaban solo por si utilizaba mal la medicación”, explica y añade que “en muchos momentos deseé haberme estrellado contra una pared bajando y haberme roto 30 huesos, mejor que un problema mental”.
Gutiérrez, que ahora tiene 38 años, comenzó a correr en el año 2000 en el equipo Once-Eroski y dos años después fichaba por el Illes Balears, el actual Movistar. Fue campeón del mundo Sub’23 en 1999 y seis veces campeón de España, cuatro contrarreloj y dos en ruta. Su mayor éxito llegó en 2005, cuando conquistó la medalla de plata en el Mundial contrarreloj. “En marzo de 2013 fue la primera vez que intenté hacerme daño. No sabía qué me pasaba en la cabeza pero no estaba bien. El ciclismo es un deporte muy difícil, estresante, y llegó un momento en que sentí que algo no funcionaba. Me retiré en el Tour de ese año por un colapso mental, por pánico. En los Pirineos me bajé de la bici. Solo tenía ganas de desaparecer de la carrera y luego del mapa”, relata.
Ahora cuenta su historia para ayudar a otros en su misma situación: “No cobro, pero estoy, piso el césped… ¿Qué más puedo pedir, si son mi mejor medicina? El dinero no da la felicidad”, concluye.