Trauma craneoencefálico; contusión pulmonar; fracturas de oído, de pómulo, de la base del cráneo y de la clavícula, no acabaron con la vida ni con la carrera deportiva del ciclista colombiano Esteban Chaves, que hoy es segundo en el Giro de Italia.
El 16 de febrero de 2013, Esteban competía en Italia en el Trofeo de Laigueglia cuando chocó con una señal de tránsito, un accidente que por poco lo baja de su bicicleta para siempre. De los múltiples traumas, lo más grave era una lesión de nervios que recorren desde la columna hasta el brazo, que estaban destrozados.
El pronóstico no era el mejor, pero una cirugía de Plexio Braquial realizada en la Clínica Cardio Infantil, sumado al trabajo de ortopedistas, neurólogos, psicólogos y fisioterapeutas lograron hacer de la pesadilla de Esteban y su familia, un milagro médico.
Después de la cirugía transcurrió un año muy difícil para Esteban, asistía todos los días, dos veces al día a terapia, siempre con la voluntad y la esperanza de tener una recuperación satisfactoria, que le permitiera volver a competir.
“La constancia, su voluntad y el equipo que lo atendió, además de un trabajo acertado, permitieron que su recuperación fuera un éxito”, aseguró la fisioterapeuta, Angie Báez.
A su constancia le fue inyectado una motivación más cuando estando aún en proceso de recuperación,, recibió una oferta del equipo australiano Orica para hacer parte de su escuadra. Así fue como este guerrero decidido a vencer todas las barreras volvió subirse a la bicicleta. Los traumas del pasado le dieron la fuerza a Esteban para ser hoy segundo en el Giro de Italia y favorito en llevarse este título.
Esteban Chaves, un milagro del ciclismo
