En agosto de 2015, BMW de Norteamérica, socio oficial de Movilidad del Comité Olímpico de los Estados Unidos (USOC, por sus siglas en inglés), anunció la intención de crear la nueva silla de ruedas de carreras para el equipo de Atletismo Paralímpico de los Estados Unidos.
Ahora los diseñadores de BMW están trabajando con atletas y entrenadores del Equipo de E.U.A. para diseñar y desarrollar la silla de ruedas de carreras que hará su debut en las competencias en los Juegos Paralímpicos de Río 2016.
Esta silla de ruedas de carreras aprovecha la estética y la ingeniería del diseño de los vehículos del fabricante de automóviles. Abarcando las bases y competencias centrales de BMW, la silla cuenta con eficiencias aerodinámicas de avanzada, materiales resistentes y ligeros como la fibra de carbono, un rediseño completo del chasis y un enfoque personalizado para adaptarse al atleta.
BMW trabajará durante los próximos meses para continuar ajustando y mejorando la silla de ruedas rumbo a la competencia. Se tiene programado que la flota final de sillas de ruedas, que se usarán en los Juegos Paralímpicos de Río 2016, se entregue a los pilotos de atletismo Paralímpico de los Estados Unidos en verano de 2016.
La silla de ruedas de carreras de BMW es el cuarto proyecto de transferencia de tecnología de la empresa, después del trineo de dos plazas, el cual ayudó al Equipo de Estados Unidos a superar la falta de medallas desde hace 62 años en los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014.
De acuerdo con Brad Cracchiola, Director Asociado, BMW Group Design Works, el trabajar en este proyecto es experiencia verdaderamente gratificante para el equipo y están orgullosos por lo que han podido lograr en el último año y medio con estos atletas y sus entrenadores. “Desde los ajustes y las sesiones de inmersión, hasta el análisis de datos y pruebas en tiempo real, tuvimos la oportunidad única de construir un dispositivo de carreras totalmente personalizado. Estamos ansiosos por completar el producto final y esperamos ver competir al Equipo de E.U.A.”. concluye Cracchiola.
