El grupo yihadista Estado Islámico (EI) decapitó esta semana, ante un público de ancianos y de niños que luego tuvieron que verificar los cadáveres, a tres jugadores de fútbol de Raqqa y a su entrenador, tras acusarlos de espiar para los rebeldes kurdos y practicar un deporte antiislámico.
Las víctimas jugaban para el popular equipo Al Shabab, y el grupo disidente «Raqqa is being slaughtered silently» (Están masacrando a Raqqa en silencio) difundió imágenes y videos del asesinato en su cuenta de la red social Twitter, informaron hoy distintos medios de prensa.
Según el grupo disidente, los futbolistas decapitados eran Osama Abu Kuwait, Nehad Al Hussein, Ihsan Al Shuwaikh y su hermano Ahmed, director técnico del equipo, según informaron el periódico británico Daily Mail y la cadena RT.
En algunas de las imágenes aparecen vestidos con el equipo deportivo del club y en otras con el uniforme naranja de los condenados a muerte por el EI, marchando hacia el sitio de su asesinato por la mitad de la calle.
La decapitación se produjo en plena calle, en la localidad ubicada 540 kilómetros al noreste de Damasco, y que desde hace dos años es el corazón del «califato» del EI en Siria.
El EI prohibió la práctica del fútbol y cualquier otro deporte organizado desde que se apoderó de la localidad, sometida desde hace semanas a un cerco militar que se va cerrando progresivamente.
En las imágenes, que fueron difundidas primero por el propio EI en sus cuentas de las redes sociales, aparece además una quinta persona, no identificada, que también fue ejecutada con el sanguinario método con que los yihadistas aplican su particular interpretación de la ley islámica.
No es la primera vez que el EI asesina futbolistas o simpatizantes del fútbol.
En 2015, el EI publicó en su sitio web el ametrallamiento público de 13 adolescentes en Mosul, otra localidad bajo su control, esta vez en Irak, por el delito de mirar un partido entre Irak y Jordania por televisión.
La Unión General de Deportes de Siria condenó el «odioso crimen», y señaló que no era de extrañarse que el grupo yihadista lo perpetrara, dados sus antecedentes, en un comunicado con la firma de su presidente, Muafak Jomaa, difundido por la agencia de noticias SANA.
Estado Islámico decapita a cuatro jugadores del Al Shabab
