El atleta paralímpico sudafricano Oscar Pistorius, condenado por el asesinato de su compañera sentimental, la modelo Reeva Steenkamp, aseguró en una entrevista que será transmitida la noche del viernes, que su novia habría preferido que dedicara su condena a ayudar a los pobres en lugar de ingresar en la cárcel.
«No quiero volver a la cárcel. No quiero arruinar mi vida entre barrotes», dijo Oscar Pistorius en una entrevista que será emitida por la cadena británica ITV, la primera que concede desde la tragedia que tuvo lugar en la noche de San Valentí (febrero) de 2013.
«Si tuviera la oportunidad de redimirme, quisiera ayudar a los pobres. Creo que si Reeva me observa desde algún lugar, ella desearía que viviese esa vida», añade.
Oscar Pistorius, condenado por el asesinato de Reeva Steenkamp, será informado de la pena a la que tendrá que hacer frente el próximo 6 de julio.
Inicialmente condenado a cinco años de cárcel por homicidio, fue puesto en libertad después de un año de prisión y, desde entonces, ha estado bajo arresto domiciliario. Él siempre ha asegurado que mató a su novia por error, al confundirla con un ladrón que se adentró en el domicilio que ambos compartían en un barrio residencial.
«Reeva era una persona fantástica, y si la gente piensa que yo la maté deliberadamente , es que no me conoce lo mñas mínimo. me siento muy triste por ello», dijo Pistorius en extractos de la entrevista que ya han sido divulgados por la prensa del Reino Unido.
«Pero maté a Reeve accidentalmente y tengo que vivir con eso. Todavía siento la sangre en mis manos, el calor que desprendía… Entiendo el sufrimiento de la gente que la quería y que la echa de menos. Yo siento el mismo dolor, el mismo odio hacia mí mismo», continúa.
El campeón paralímpico recordó «el miedo que sentí», cuando escuchó ruidos en el cuarto de baño y pensó que un ladrín había poenetrado en su domicilio, lo que llevó a tomar un arma y dirigirse sobre sus muñones a la zona de peligro. «De repente oí un ruido procedente del aseo. Supuse que era la puerta del baño y antes de darme cuenta ya había efectuado cuatro disparos», explicó.
«Abrí la puerta e inmediatamente vi a Reeva en el inodoro. Yo sabía que estaba muerta, me arrodillé y la abracé con fuerza «, agregó.
Durante la entrevista, Pistorius que lloró a menudo, también escondió su cabeza entre las manos, un gesto que se repitió durante el proceso que se siguió contra él. También dijo que fue recientemente objeto de graves insultos mientras se encontraba de compras en una tienda de comestibles.
La defensa de Pistorius en el proceso dijo que el deportista no estaba en condiciones de testificar por hallarse inmerso en una depresión severa, un argumento que el fiscal destrozó al recordarle que, muy depresivo no podía estar después de conceder una entrevista a la televisión británica.
En la corte la semana pasada, Barry Steenkamp, el padre de la víctima, dijo entre lágrimas que Pistorius tenía que «pagar por su crimen.»
El fiscal pide una pena de quince años de prisión mínima contra el campeón, que esa es la condena mínima por asesinato en Sudáfrica. El juez, sin embargo, tiene la capacidad para suavizar la pena si considera que existen circunstancias atenuantes.
Pistorius: «No quiero arruinar mi vida en la cárcel»
