El delantero Luis Suárez es una persona comprometida hasta la médula. El uruguayo apadrina la decimosegunda edición de ‘Relatos Soidarios’ dedicada en esta ocasión a una enfermedad hereditaria conocida como PKU. Candela, una niña de tres años enferma de esta dolencia, estaba presente en el acto de presentación. La niña se hizo notar por su simpatía y por no estar nunca quieta. pero el momento más tierno y emotivo de la madre de Candela, acompañada de su hija, le pidió un favor al delantero. ¿Cuál? Pues que el próximo gol que marque se lo dedique a los enfermos de PKU portando una camiseta por dentro de la blaugrana.
El problema es que esto gesto le acarreará directamente una tarjeta amarilla.En cualquier caso, Suárez está dispuesto a aceptar este compromiso. «Será la amarilla que reciba con más gusto», reconoció el delantero, que se emocionó visiblemente al escuchar a Candela Y es que Suárez recordó que «yo tengo tres hijos y me emociono pensando en la suerte que hemos tenido».
Hay que recordar que Suárez hará una excepción cuando marque su gol porque habitualmente siempre se lo dedica a su mujer y dos retoños: Sofía, Delfina y Benjamín. El gesto que hace es dar un beso a tres de sus dedos en cada gol que marca. Ahora se levantará la camiseta para enseñar el mensaje que lucirá a favor de la lucha contra la enfermedad PKU.
El único problema es que Suárez tendrá que estar muy pendiente de la evolución del partido ya que si ve una amarilla durante el transcurso del partido no podrá dedicarle el gol a Candela bajo riesgo de ver la segunda y ser expulsado.
A día de hoy, Suárez ya cumplió ciclo de tarjetas y ahora mismo cuenta con una amarilla en su zurrón, por lo que le quedan todavía cuatro para cumplir ciclo.