«He hecho un pedacito de historia», dijo al diario MARCA Alfonso Cabello tras conquistar el bronce en la prueba del kilómetro del Campeonato de España de ciclismo en pista absoluto. Lo dice con humildad pero también orgulloso por lo que significa para él -era su sueño desde hace años-, pero sobre todo para el deporte paralímpico.
«Una de las cosas que me movía a hacerlo, además de mi afán de superación y de que era un objetivo desde hace muchos años, era dar a conocer que la discapacidad no es un impedimento a la hora de realizar un objetivo o a la hora de proponerse cualquier cosa. Lo importante es que he demostrado que soy un deportista de alto nivel, como el resto de los que están compitiendo aquí, sin adjetivos. Ni discapcidada, no no discapacidad, ni olímpicos ni paralímpicos. Simplemente somos personas que entrenamos muy duro para llegar lo mejor posible a las competiciones y aquí se ha demostrado que la discapacidad no es ningún tipo de barrera. Espero aportar ese granito de arena para que la gente que sigue pensando que es un muro o un problema se dé cuenta de que los muros son mentales«, dice convencido.
El ciclista cordobés está acostumbrado a subir al podio. Es campeón paralímpico en Londres 2012, bronce en Río 2016 y tetracampeón mundial individual en la prueba del kilómetro. Sin embargo, a pesar de todos estos éxitos, reconoce que la medalla conseguida en Valencia es especial.
«Esta medalla tiene un sabor especial porque es un reto que tenía desde hace mucho tiempo y espero que sea la primera de muchas competiciones en Campeonatos de España sin discapacidad y estrenarme con un podio es inmejorable. Es una hazaña tan grande como el oro paralímpico o uno de los cuatro oros mundiales que he ganado. Es un día que difícilmente voy a olvidar y he hecho un pedacito de historia», dice.
No llegaba al cien por cien
Alfonso ha hecho historia a pesar de no llegar en su mejor momento. «Estoy muy contento. Hace mes y medio tuve una caída muy aparatosa y me hice daño en el codo. Y llegué con tres semans de entrenamiento tras un parón bastante grande. No llegaba al cien poc cien pero, como siempre, he salido a darlo todo. Me he encontrado bien y, aunque el tiempo ha estado lejos de mis registro,s creo que para la pista y ser un Campeonato de España absoluto, yo estoy muy satisfecho», reconoce.
«La clave del éxito ha sido salir concentrado y sentirme arropado, me ha dado muchas alas. No era ni de lejos el día que mejor tenía las piernas pero gracias al apoyode todos he sacado fuerzas de donde no las tenía y se lo debo a todos ellos», añade.
Y la medalla se la dedica a todos los que le apoyan siempre y, en especial, a Javier Otxoa, ciclista paralímpico fallecido recientemente.
Alfonso no quiere acabar sin dar las gracias al resto de ciclistas que han competido con él. «Me he sentido como en casa, hago muchas concentraciones con la selección española de pista élite y ya nos conocíamos. Lo que más me gusta es que me respetan mucho como persona y como ciclista y eso es casi mejor que la medalla».
Félix García Casas, el seleccionador nacional del equipo de ciclismo paralímpico, es una de las personas que mejor y más conoce el talento de Alfonso. «Es un ciclista que no se esconde nunca, que siempre lo da todo en la pista y con un potencial enorme en la prueba del kilómetro. El tiempo que ha hecho en Valencia es bueno, pero discreto para él y puede recortar bastante el tiempo de Valencia (1:06.307», dice. Pepe Moreno (1:03.716) y Alejandro Martínez (1:04.071) fueron oro y plata, respectivamente.
Además, Félix le augura un gran futuro en campeonatos internacionales de ciclistas sin discapacidad. «Es uno de los grandes ejemplos de integración en el deporte, en el ciclismo en este caso. Ha demostrado que si se mide con ciclistas a nivel nacional sin discapacdidad y puede ganar una medalla. Su futuro está en dar un paso más en pruebas internacionales con ciclistas sin discapacidad porque con los tiempos que es capaz de realizar puede ser un referente del ciclismo en pista español convencional a nivel internacional», añade.