Escrito por Franklin Mirabal
El joven nuevo ministro de Deportes, Kelvin Cruz, se mostró muy emocionado luego de ser parte de sus primeras dos inauguraciones en Montecristi.
Al hablar, dijo dos cosas: Una jocosa, y otra muy relevante.
¿Qué dijo?
Que inmediatamente asumió el puesto en Miderec fue llamado a una reunión por la vicepresidenta Raquel Peña.
Y se preguntó: ¿Wao, qué hice. Fue algo malo, tan rápido me llaman? Bromeó.
Pero luego se sintió aliviado al enterarse del motivo de la reunión.
La vicepresidenta le dijo que era una amante del deporte y que harían muchas cosas juntos.
¡Eso fue tremenda noticia!
Por dos razones:
1- Un ministro joven de inmediato genera química con la Vice.
2- Todos sabemos que el presupuesto de Miderec es limitado.
Si Kelvin fortalece esas relaciones, la Vice le puede apoyar desde la Presidencia y hasta tocando puertas de otros Ministros.
Eso es trabajar en equipo.
Cuando usted examina el presupuesto del Ministerio de Deportes se da cuenta que es poco.
Usted debe restar el apoyo anual a las Federaciones Deportivas, rescate y construcción de instalaciones deportivas, la empleomanía a nivel nacional, el dinero extra que hay que buscar cada vez que hay Juegos Centroamericanos, Panamericanos y Juegos Olímpicos.
Sume los Juegos Nacionales, que -pienso- es un error no realizarlos cada dos años.
Si fuera Kelvin, le enviara un ¡Buenos días! diario a la Vice Raquel Peña, porque ella le puede ayudar bastante en Miderec.
