GERALDO CASTRO, UN PARALÍMPICO QUE TRIUNFA A PESAR DE LAS ADVERSIDADES

Tomado del Listín Diario

Además de malas habilidades de comunicación, Castro también padecía un brazo derecho poco desarrollado.

Esto complica aún más el equilibrio entre él y otros deportistas excepcionales. Las excusas son para las personas que no hacen lo mejor que pueden o que no tienen metas claras sobre lo que quieren lograr en la vida.

La mayoría de los atletas de alto nivel muestran más valentía que los que se quedan atrás. Sin embargo, hay un grupo de atletas que son particularmente sorprendentes. Geraldo Castro es un taekwondista sordomudo de 24 años que lidera el deporte en la región en su categoría.

Además de malas habilidades de comunicación, Castro también tenía retrasos en el desarrollo de su brazo derecho. Esto complica aún más el equilibrio entre él y otros deportistas excepcionales. Su éxito en el fitness es también una batalla por el lenguaje de señas.

Castro debe diferenciar entre su oponente y su entrenador en la batalla. Sin embargo, esto no es obstáculo para Geraldo, originario de Boca Chica y ganador de dos medallas de plata en Juegos Paraamericanos. Iniciar un entrenamiento es una de las cosas más difíciles debido a la incómoda comunicación con los técnicos.

Todos tuvieron que aprender lengua de signos para enseñarme este deporte. Castro dijo, a través de Adriel Lamar, intérprete del Ministerio de Deportes que acompañó a Castro durante sus entrenamientos y competencias, “desde los 3 años he soñado con ir a los Juegos Olímpicos y hoy podemos ver los frutos de todo este trabajo. .

Probó el baloncesto y el atletismo antes de dedicarse al taekwondo. Fue en 2018, en Barranquilla, cuando viajó por primera vez. Volar como un atleta cambió mi vida.

“Me hizo amar aún más el taekwondo y eso es lo que me hace despertar cada día”, continuó. Este enfoque no puede lograrse sin el apoyo general de la sociedad. Cada uno de los colegas de Castro contribuyó a ayudarlo a realizar su sueño.

Aquí nadie me trata como alguien especial, me hacen pasar por el mismo entrenamiento que todos los demás y eso es lo que más me gusta porque me siento parte de eso, dice Geraldo. Nunca me he sentido una persona discapacitada. Mi mayor intención es que nos traten como seres humanos normales.

Además de su talento, Geraldo también es uno de los deportistas más disciplinados, frecuentando todos los días el pabellón de taekwondo, ubicado en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte. Su entrenador, Rudy Mateo, lo llama un guerrero que da ejemplo a todos en la selección nacional. Geraldo es la persona más generosa, no falla y no nos deja ver que es débil.

Fue allí porque se sacrificó, destacó Mateo, quien también dirige la selección de primer nivel.