Emmanuel Macron busca permitir que las personas que ayudaron en el evento puedan acudir, y esperan tener toda la infraestructura terminada para la competición.
El Estado francés comprará 400.000 entradas de los Juegos Olímpicos de París 2024 para regalarlas a jóvenes, discapacitados y voluntarios del evento, prometió el presidente Emmanuel Macron.Noticias relacionadasLos Juegos comenzarán justo dentro de dos años y con ese motivo Macron encabezó el lunes una reunión de los ministros relacionados con el acontecimiento y del comité organizador, en la que se repasaron el calendario de obras y el presupuesto.Tener las instalaciones listas en el plazo determinado, tanto las deportivas como la infraestructura de transportes, es un trabajo “realmente a contrarreloj”, aunque recalcó que están seguros de poder terminar a tiempo. “¡Lo conseguiremos!”, afirmó.
Macron destacó el “contexto difícil” de la organización de los JJOO: “Primero fue la covid en los dos últimos años, y ahora hay una inflación muy alta”, vinculada a la guerra de Ucrania, “que “genera costes adicionales, sobre todo materiales”.Sin embargo, descartó que el Gobierno pueda introducir algún tipo de nuevo impuesto para financiar el evento olímpico: “Los Juegos deben financiar a los Juegos”.Macron también insistió en que se están tomando todas las medidas para garantizar la seguridad del evento, especialmente de la ceremonia de apertura, que como gran novedad tendrá lugar en el río Sena, en una zona abierta que reunirá a unas 600.000 personas según las previsiones.
“Esta ceremonia es un pequeño milagro de la organización, lo que significa que tenemos que hacerlo todo bien”, explicó.También recordó que habrá un gran despliegue de policías y gendarmes, a los que sumarán vigilantes privados, y que eventos como el Tour de Francia se adelantarían o atrasarían para que no coincidan con los Juegos, a fin de no dispersar a las fuerzas de seguridad.Sobre el transporte, avanzó que “harán lo posible” para que no haya huelgas en el sector durante las tres semanas de los Juegos, y lamentó que “no estamos a la altura” en la accesibilidad tanto en el transporte público como en el privado.
Macron también pidió que los Juegos Paralímpicos que se celebrarán tras los Olímpicos hagan que “el país se interese más por nuestros atletas paralímpicos que en el pasado”.
Además confió en que este evento sea un “catalizador” de lo “mejor que Francia puede ofrecer al mundo”, y celebró que gracias a los Juegos habrá mejoras en París y su región, ya que por ejemplo se prevé que el Sena vuelva a ser apto para el baño. “¿Quién iba a imaginarlo hace sólo unos años?”.